sábado, febrero 26, 2011

Inteligencia Emocional y Productividad: Víctima o Creador

Inteligencia Emocional y Productividad: Víctima o Creador: "Hace unas semanas publicamos una entrada titulada 'Líder o Víctima', por la que recibimos algunas recomendaciones, historias y referencias a..."

domingo, febrero 13, 2011

Las relaciones amorosas y/o de amistad en las organizaciones del siglo 21

En los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, las organizaciones lucharon contra las relaciones sentimentales dentro del trabajo a medida que se incrementaba la cifra de mujeres que se incorporaba al mercado de trabajo. “La legislación sobre la igualdad de derechos en muchos países hizo que la mayoría de las organizaciones estuviesen más preocupadas por las citas en el lugar de trabajo o cualquier conducta que pudiese ser interpretada como acoso. La política de “cero-citas” entre subordinados y superiores era lo habitual. Algunas organizaciones tenían políticas de este tipo incluso entre compañeros del mismo rango, aunque no era habitual su obligado cumplimiento”.

Hoy en día, prohibir las relaciones personales en el trabajo ya no es tan habitual como antaño; según la profesora de Sociología de la Universidad Estatal de California Janet Lever, uno de los motivos es que las políticas rígidas que prohíben tener citas son frecuentemente una invitación a presentar demandas judiciales por discriminación, ya que en la práctica suelen penalizar más a las mujeres que a los hombres. La probabilidad de que los hombres sean supervisores, añade Lever, es más alta, y si un superior masculino y una subordinada empezaban a salir juntos, normalmente era la mujer la que era trasladada o despedida.

La política de cero-citas simplemente no se ajusta a un entorno laboral moderno en el que prácticamente la mitad de los trabajadores son mujeres, sugiere Lever. Hoy en día la gente tarda más tiempo en casarse, y en muchos casos tiene jornadas laborales más prolongadas en comparación con sus padres. La gente conoce a otras personas con intereses similares en el trabajo, y los empleadores deben asumir que erradicar las relaciones personales no es algo realista. “La gente está empezando a aceptar el hecho de que no hay nada malo en tener una cita” con alguien del trabajo, aunque Lever está de acuerdo en que las relaciones supervisor-subordinado aún siguen siendo tabú.

Una encuesta realizada por la firma de recolocación Challenger, Gray & Christmas, con sede en Chicago, encontraba que el número de empleados estadounidenses que entraban dentro de la categoría de solteros había aumentado un 18,3% entre 1995 y 2005 hasta alcanzar prácticamente los 59 millones de personas, cerca del 44% de la fuerza de trabajo. Casi la mitad de los trabajadores solteros tenían edades comprendidas entre los 20 y los 34 años, la edad en la que se tienen más citas, concluía el estudio. “Nadie pone en duda que las citas a través del trabajo han ido en aumento entre esos 28 millones de jóvenes, algunos de los cuales pasan más tiempo juntos en la oficina que fuera del trabajo”, escribe el consejero delegado de la firma, John A. Challenger. “Los empleadores no tienen otra opción más que permitir citas en el lugar de trabajo”.

Challenger señala que un informe de 2003 realizado por American Management Association (AMA) reveló que el 30% de los gerentes habían tenido citas con colegas del trabajo, y que el 96% de ellos afirmaban que era aceptable salir con un compañero de trabajo que no fuese ni subordinado ni superior jerárquico. “Claramente, las citas en la oficina han ganado aceptación en la última década, pero las organizaciones deberían tener cuidado en lo que respecta a las relaciones en el lugar de trabajo. Las organizaciones deberían intentar establecer una serie de principios para evitar potenciales problemas, incluyendo reclamaciones por acoso, cotilleos en la oficina o una menor percepción moral”.

El informe de AMA señalaba que el 12% de las organizaciones habían redactado políticas sobre las citas. De ese porcentaje, el 92% prohibía que los superiores saliesen con subordinados, y el 11% prohibía salir con un compañero del mismo rango.

“Las empresas que eligen no abordar el tema de las relaciones sentimentales en el trabajo podrían acabar en una situación delicada si una de estas relaciones se vuelve amarga”, escribe Challenger. “Estas situaciones pueden acabar rápidamente en demanda por acoso sexual. Pueden surgir otros problemas si uno de los dos es ascendido. Las empresas pueden tener problemas para convencerles de que una relación antes permitida está ahora prohibida”.

¿Cuál es la mejor política?

martes, febrero 08, 2011

La violencia en las escuelas (Bullying)

En esta semana un grupo de políticos mencionaron que México ocupaba el primer lugar de los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) en violencia y acoso escolar.
Dado que el tema es algo que me es familiar (yo mismo sufrí violencia escolar durante más de 2 años de uno de mis compañeros en la primaria) y por la referencia de mis hijas y sobrinos, es algo que aún se presenta en las escuelas tanto públicas como privadas hoy en día; decidí profundizar al respecto.
La aseveración de tales políticos tomó como referencia el Estudio Internacional sobre Docencia y Aprendizaje: Teaching and Learning International Survey (TALIS), presentada en México en Junio de 2009.

A año y medio de dicha presentación, el tema de violencia en las escuelas ha sido tratado de manera aislada por los diferentes gobiernos locales. De hecho, recientemente en un seminario sobre el tema, se reconoció que los maestros tienen poca o nula información al respecto.
En especial los maestros de escuelas públicas confunden un conflicto aislado entre alumnos, con el bullying; por lo que no establecen acciones que permitan tratar o disminuir el problema.
En un entorno en el que se ha dicho hasta el cansancio que una de las soluciones fundamentales para combatir al crimen organizado y a la violencia en general es la educación, no deja de ser preocupante el que no se atiendan de manera oportuna datos como estos.
Pero lo más decepcionante, es darse cuenta de que en la mimsa OCDE existe un programa especializado para hacer frente de manera integral a la violencia escolar; pero que México no es parte de ese programa.

El Plan Internacional aprender sin miedo es una campaña mundial para acabar con la violencia en la escuela, vale la pena conocer más al respecto: http://plan-international.org/aprendersinmiedo


Es una pena que un programa como el anterior se vea limitado por intereses de partido, políticos, gremiales y económicos, que condenen a una sociedad y su futuro a la mediocridad, y a vivir en un país donde se aplique y aprenda de manera cotidiana la Ley del más fuerte.